La postura: Un reflejo de nuestro estado de ánimo
Junio, 2024. Según el Doctor Puig, no solo son nuestras emociones las que determinan nuestra postura, sino que, en muchas ocasiones, es la acción la que nos lleva a la emoción.
Reflexiona que en momentos de agobio o desánimo, nuestra postura suele reflejar nuestro estado interno con hombros caídos, mirada baja, pecho hundido. Sin embargo, cuando nos sentimos triunfantes o llenos de energía, nuestra postura se transforma: la mirada se eleva, el pecho se expande y nos sentimos más grandes y capaces.
La postura es una herramienta de transformación
La conexión entre postura y emoción tiene un profundo impacto en nuestro bienestar. Asumir una postura de derrota refuerza las emociones negativas, mientras que adoptar una postura de confianza y determinación envía señales positivas a nuestro cerebro, haciéndonos sentir más capaces, seguros y llenos de vitalidad.
Inspirado en estas ideas, el Doctor Puig nos propone un sencillo pero poderoso ejercicio: la próxima vez que te sientas inseguro o insegura, haz una pausa. Endereza tu postura, eleva la mirada, respira profundamente y siente esa energía positiva que fluye en ti. Él garantiza que, si mantienes esta postura durante unos minutos, notarás un cambio significativo en tu estado emocional.
Las palabras de Puig nos recuerdan que las respuestas a nuestros desafíos se encuentran en nuestro propio interior. El modificar nuestra postura, puede tener un impacto profundo en nuestra manera de afrontar los retos y vivir cada día con mayor plenitud.
Te invitamos a poner en práctica esta sencilla herramienta para experimentar el poder transformador de la postura en nuestras vidas.
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